1000 SONRISAS

Hoy reparto mis sonrisas para quien tenga a bien recibir, y para el que las quiera, que pueda sentir, lo más bonito del mundo que es saber sonreír.
     Mil sonrisas para la familia, que aunque a veces lejos, siempre a mi lado están, que compartimos el tiempo muchas veces sin hablar, otras con calor humano, pero desde la humildad de saber que nos tenemos aún sin podernos tocar.
     Mil sonrisas van para los amigos, pero a los de verdad, que no cuestionan lo que haces o lo que puedas pensar, que entretienen los momentos que nadie puede llenar, esas horas tan preciadas que hay que saber gastar, porque el tiempo se marchita sin poderlo remediar.
     Mil sonrisas también quiero mandar, a los que tienen curiosidad y hoy me estarán leyendo esta locura sin par, porque el que no tiene inquietudes mal por la vida irá.
     Mil sonrisas a aquellos que no se atreven, para que se decidan ya, que arriesgarse es divertido y te puedes sorprender de todo eso que temes y satisfacción traerá, y si te caes caminado alguien siempre habrá que cure bien tus heridas, para que las cicatrices no las noten los demás.
     Mil sonrisas para los que valoran que nadie es menos ni mas, simplemente somos almas que aprenden a caminar, sin saber a quien rebajas y a quien puedes ensalzar, que fingir es momentáneo y acaba por cansar, que de apariencia no se vive, lo que importa está detrás.
     Mil sonrisas comparto con los amantes de las letras, ávidos de conocer todo aquello que se escribe y así poder deleitar con sus mezclas de palabras y nos las puedan legar, a estos que aquí escribimos sin pretender imitar, solo damos lentos pasos pero queremos andar.
     Mil sonrisas obsequio a aquella gente confundida que no saben que los pensamientos erróneos pueden llegar a ser un arma fatal con la que poder herir a esa bella persona que moriría por ti.
     Mil sonrisas a aquellos que dicen lo que sienten , pero sin pelotear, que la adulación es fea y no quiero ni pensar lo que sufre aquel que escucha cuando ve la realidad y nota en sus entretelas esa negra falsedad de no saberse erudito de aquello, de tal o cual, cuando encierra en su persona un ser único y especial.
     Mil sonrisas les mando a los que envidian porque no saben amar, quiero esparcir mi cariño para que al menos aprendan, a dar sin nada esperar, que eso es lo que hago ahora, rociar con mil sonrisas este mundo virtual.