LA VIDA ESTÁ LLENA DE POTAJES.

Escupido por una vieja, sin un solo diente,
salio un garbanzo al mundo, negro y doliente.

En lo alto de aquel cerro, solo y en paz quedó, 
pensando que la luna, allí lo divisaría mejor.

Durante todo el día el garbanzo caviló y caviló….
-Me bañará con su luz helada, garbanzo blanco luciré, 
y en orgullo de alguna cazuela, seguro me convertiré.

Llego la noche y la luna no asomaba, 
noche sin estrellas, mas bien estrellada
tanta era la oscuridad...que calaba.

Pasaron las horas y la madrugá lo encontró….
tiritando, tiritando….tirititando, 
y así quedó dormido, que no soñando.

Divagando, divagando pasó el garbanzo el día…
-Con espinacas…..¡Oh no! Verde se me verá, 

-Con col….¡Oh no! Hay a quien le siente mal. 

Mejor garbanzos solos…. que tanta ambigüedad.

En estas estaba cuando llegó la noche. 
Por una rendija asomó la luna, tras su tul negro, 

broche de plata moruna.
Mañana será…..No hubo ningún reproche.

Pasaban los días, el garbanzo se impacientaba, 
La luna perdiendo su timidez, cada vez más mostraba,
¿Cómo no esperar? Su sueño cumpliría, 
al ser garbanzo blanco….cuanto gozaría.

De repente una noche sigilosa apareció de la nada,
llena de luz blanca inagotable, sonrisa nacarada,
haciendo cómplice de sus guiños a todo el que la miraba.

El garbanzo lleno de júbilo gritaba….
-¡Luna mírame!….¡Quiero ser garbanzo blanco! 

Solo tu puedes…¡Báñame con tu luz!
Y poco a poco , fría ….ella se alejaba.

Quedó desolado, sin esperanza, sin espada…
sin puñal que lo matara, 
y cuando mas frío hacía asomó el Sol con su luz templada.

El calor lo abrazaba, comenzó a recuperar los sentidos, 
que de tanto divagar por la luna, quedaron dormidos.

Los recuerdos de la bella y blanca luna volvieron…. 
y a su cabeza de garbanzo, estas palabras vinieron:
-Mejor garbanzo negro en el mundo girando
que garbanzo blanco…tirititando , tirititando .

Dicho esto,  se echó a rodar cerro abajo, 

no fue un suicidio

Fue una tocata y fuga rumbo... al carajo.